Podría haberme percatado
de que los niños ambidiestros y pelirrojos
por más que lo
disimulan
sienten debilidad por la crema de verduras.
Podría haberme dado cuenta,
de que las personas que pronuncian la palabra mamífero
en día festivo o incluso en la víspera
son gente mezquina, pero bailan swing como si la vida les
fuera en ello.
Si las hubiese contado, habría sabido
que cuando un ascensor de siete plazas va repleto
el ascensor contiguo sube y baja tristemente desocupado
hasta en un total de
tres ocasiones distintas.
Todavía no lo sé, pero igual un día descubro
que las ancianas que siempre veranean en Huelva
pero este año van a Cantabria, por cambiar,
tienen un don para la música contemporánea.
Todas ellas, serán correlaciones estúpidas
hasta que pueda confirmarlas
y que conste que estoy a punto.
Pero hay una que acabo de comprobar
sin sesgo posible y con una buena muestra.
Allá donde veo una mujer joven
con abundantes canas en el cabello,
busco sus pies y sin excepción,
quedo absolutamente prendada
de sus zapatos.
Y yo,
satisfecha de mi trabajo de campo
yo, que tan mal gusto tengo
para envolverme los pies con esta ropa con suelas,
He decido dejar de teñir mi pelo.
Por una vez,
será pan comido.
Con un poco de suerte
en unos cuantos veranos
vestiré por primera vez un calzado bonito.
me aventuro a decir que serán
unas preciosas sandalias blancas
a juego con mi pelo.
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